5 Junio 2018
El proceso de independencia cubano va a durar durante todo el siglo XIX. La importancia económica y estratégica de la isla fue motivo de interés para las grandes potencias de la época.
En 1848, con la políticas expansionistas de Estados Unidos denominadas el ¨destino manifiesto¨ y ¨la doctrina Monroe¨, los capitalistas (grandes propietarios) cubanos vieron la posibilidad de anexarse a Estados Unidos.
Estados Unidos, que mostraba un creciente interés por la isla, apoyaba a todos aquellos que se quisieran independizar de España e intento varias veces comprar la isla. Para esa época, Estados Unidos recibía el 83% de las exportaciones cubanas, mientras que España recibía tan solo el 6%. En 1895 la inversión americana en Cuba alcanzaba 50 millones de dólares y su comercio anual 100 millones. Es decir la economía cubana era realmente norteamericana.
Desde 1868, comenzaron las luchas de independencia, encabezadas por el líder cubano y poeta José Martí. La guerra estallo el 24 de febrero de 1895. El 18 de mayo a los pocos meses de haberse iniciado el alzamiento, murió combatiendo en boca de Dos Ríos José Martí. Siguieron adelante en la lucha Gómez, Maceo y Calixto García, alentados por Estados Unidos. En 1898, Estados Unidos declara la guerra a España. El 12 de agosto de 1898, en Washington, se firmó el tratado de paz finalizando las hostilidades, Cuba obtenía su independencia de España, pero quedaba bajo el absoluto control estadounidense.